Testigos de enfrentamientos en la sierra de Guadalupe y Calvo narran su amarga experiencia
Fernando Ávila
lunes, 20 junio 2022 | 10:15María Victoria Q. una de las pocas personas que se quedaron en Santo Domingo, Guadalupe y Calvo, narra sobre cómo fueron varios días de no dormir ni de día ni de noche por los enfrentamientos entre los cerros a un lado del poblado.
“Todo empezó como a las 3:00 de la tarde el miércoles pasado, comenzaron a pasar muchas camionetas a toda velocidad rumbo a Rancho Viejo, y luego comenzaron los disparos que duraban hasta dos horas aturdiendo en toda la ranchería”, explicó María sentada angustiada abrazando a uno de sus hijos de 2 años.
“Nos metimos a las casas y a encerrarse en los cuartos a escuchar los balazos que sonaban a unos metros del pueblo por el enfrentamiento”, fue hasta en la noche que se calmó un rato y para en la mañana los pobladores comenzaron a irse, unos en camionetas y otros hasta a pie con sus mochilas en la mano, huyeron del poblado dejando a sus animales (vacas, chivos, gallinas y perros) sin cuidado alguno.
“Aquí no hay autoridades, los únicos que vimos que llegaron primero y no se han ido son los soldados, pero de ahí en más nunca nadie se para por estos lados, ahora con la presencia de los soldados ya me comuniqué con la mayoría de los vecinos para que regresen a sus hogares por qué ya parece un pueblo fantasma”.
En el lugar se encontraron solamente seis mujeres y tres menores de edad, las cuales estuvieron resguardadas en sus hogares, y aseguran no huyeron por qué no tienen ningún otro lugar a donde irse.